Argumento
Estamos ya en cuenta atrás para dejar atrás este año tan peculiar, por no acompañarlo de adjetivos más floridos como puedan ser cabrón , hijo puta emulando a Camilo José Cela que era capaz de soltar tacos y pedorrearse en actos oficiales. Gran amante de la escatología, seguro que le hubiera molado muestra mierdosa portada realizada por Furillo que es la antesala de uno de los mejores números de la larga historia del TMEO. Jamás hubiésemos pensado parir un TMEO tan desternillante. No ha sido empresa difícil, todo hay que reconocerlo, porque la realidad que nos rodea últimamente es tan loca que da para hacer muchos chistes. O te da la risa loca o te tiras por la ventana. Como optamos por la primera opción, el mejor compañero para ayudar a soltar la mandíbula para despedir el año es este Tmeo. Un Tmeo gordito, pues estos últimos números le hemos metido ocho páginas más para que se joda el puto virus. Pasen y lean!