Argumento
El protagonista de esta historia es un chico a caballo entre la adolescencia y la madurez que bien podría ser tu amigo, tu vecino o tu propio hermano. Álex es un muchacho de hoy en día: Independiente, curioso y lleno de energía (bueno, quizá le sobre algo de esto último). La verdad es que es muy impulsivo y, también, muy despistado. Estas singularidades le acarrean muchos problemas con los suyos, así como en otras circunstancias cotidianas. Él lo sabe, intenta evitarlo, aunque no siempre le sale bien. Y lo pasa mal. Álex tiene un Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) y no se lo han diagnosticado hasta la fecha. A través de las páginas, los autores de "...Eh, ¡Despierta! Una movida muy turbia", Juan A. Hormaechea y Rober Garay nos invitan a seguir, de forma vivaz y con rigor científico, el camino de Álex hacia el auto descubrimiento de su problema. Al final, como en toda fábula, se deduce una enseñanza: Aunque la vida de las personas con TDAH pueda resultar difícil, hay una salida. El diagnóstico y el tratamiento mejoran la calidad de vida de los afectados y previenen posibles complicaciones futuras.