Argumento
El más famoso dramaturgo inglés de todos los tiempos triunfa con sus obras en Londres en 1603. Las normas de la época no permitían que las mujeres interpretaran ningún papel, así que todos los actores y actrices eran hombres. Entre ellos, algunas de las locas más divertidas que jamás hubo en el reino de Isabel I. Con «Yago», el autor alemán Ralf König nos vuelve a deleitar con una hilarante comedia de enredos y romances apasionados, impregnada en esta ocasión de los dramas universales shakesperianos. Imagínense la escena del balcón de «Romeo y Julieta» interpretada dos hombres, o el momento en que Othello estrangula a su amante masculino. En una época en que le podían enviar a uno a la hoguera por el simple hecho de ser homosexual, había que tomarse las cosas a risa. Se es o no se es.