Argumento
En algún lugar del futuro...
Y después de Black Hacker, ¿qué? Yo me metería en especiales de miembros de Jaque Mate y alguna otra cosilla colocada por ahí con dibujantes como Rebollo, Martín Saurí o Bleda, Juan Román parecía que disfrutaba con las ilustraciones, las portadas y los portafolios bárbaros. Además, el tenía en mente algún proyecto con el guionista José María Polls. Así que, la posibilidad de una segunda parte de Black Hacker, tal vez algún especial, estaba lejos.
Pero no estaba dispuesto a dejar escapar así como así un segundo proyecto con Juan Román (y cuando ecribo esto, hay una tercera serie juntos preparándose). Trabajar con él en la miniserie de Black Hacker supuso sorprenderme del nivel ascendente de su arte, además de hacernos amigos. Por eso intenté hacernos amigos. Por eso intenté un nuevo desafío, aunque reconozco que no me costó nada convencerle. Sabía que su fibra sensible eran, y son aún, los robots. Tan sólo debía pulsar algunas teclas para ilusionarle. ¿Ingredientes? Chica guapa, robots, ambientación un poco cyberpunk, diálogos con destellos de humor, trama atractiva y acción, mucha acción. Y conseguí que pospusiera un poco sus proyectos para adentrarse en la creación de un nuevo héroe, ¿o es un antihéroe? Da igual. Ése es Zeta.