Argumento
Desde hace siglos, dos familias se disputan, de alguna manera, el control de Japón. Los Sumeragi son conocidos como los protectores de la paz, son maestros del onmyou y se esfuerzan por traer la armonía al mundo y ayudar a los necesitados. Sus enemigos acérrimos son los Sakurazuka, un clan de ninjas asesinos cuyo líder es también conocido como el Sakuratsukamori, un asesino despiadado que no alberga sentimientos.
Desde hace generaciones ambos clanes han estado enfrentados, y muchos Sumeragi han muerto a manos de las ilusiones mortales del Sakuratsukamori de turno.Incluso el padre del actual líder sucumbió ante el enemigo. En la actualidad, Subaru Sumeragi, de tan sólo 16 años, es el líder de su familia, pero quizá es demasiado joven para ese cargo.
Educado por su abuela, una dama muy estricta, Subaru se traslada con su gemela Hokuto a la capital japonesa, donde se gana la vida practicando sus artes y ayudando a los demás.
Allí conoce a Seishiro Sakurazuka, un veterinario que a pesar de pertenecer a su clan rival no practica sus artes, y consagra su tiempo en cuidar sus pacientes... y en conquistar a Subaru, porque dice estar locamente enamorado de él. A través de los diferentes casos a los que debe enfrentarse el protagonista descubrimos Tokio, una ciudad que nunca duerme y densamente poblada, donde los sueños rotos de algunas almas en pena se empeñan en acosar a los vivos. Y no sólo las tribulaciones de las almas en pena, sino la maldad, crueldad o indiferencia de los seres humanos, que parece que poco a poco vayan abandonando sus sentimientos y su humanidad.
En este contexto Subaru y Seishiro inician una historia de amor que supera antiguas rencillas entre sus respectivos clanes.